Un mundo lleno de pequeños detalles...

domingo, 26 de diciembre de 2010

El cajón de los recuerdos..

Cuando somos mas pequeños, no nos damos cuenta de las cosas que suceden a nuestro al rededor, somos felices en la ignorancia, sin pensar en para quien somos importantes, quien es importante para nosotros...
Conforme pasan los años, la vida nos enseña sus mayores secretos, poco a poco nos da a conocer cuales son los verdaderos obstaculos y a la vez nos da pistas para conocer la solucion a estos pequeños y grandes problemas, que nos hacen crecer como personas...
Es ahí donde empezamos a apreciar las pequeñas ayudas que tenemos para poder seguir adelante... donde conseguimos ver con claridad que esas ayudas llegan hasta nosotros en forma de personas, quienes siempre se han quedado a nuestro lado...
Si miramos atrás son tantos los recuerdos que encontramos en nuestro corazon, que no hay un lugar tan grande donde podamos escribirlos todos... la gran mayoria de ellos son imposibles de describir, simplemente suceden y solo una pequeña parte de nuestra mente los almacena para en un futuro poder sonreir acordandonos de todos ellos... no solo sonreimos, tambien lloramos por añorar esos preciosos momentos en los que la felicidad era una de nuestras  menores preocupaciones...
Si ademas de pensar en los recuerdos, pensamos en las personas que formaron parte de esos bonitos momentos, tambien encontramos a mucha gente, pero a muy pocas que de verdad hayan puesto su granito de arena para ayudarnos a superar esos obstaculos... encontraremos a una o a dos personas que hayan dejado huella en nosotros de una manera realmente importante...
Al centrarnos en esas personas, recordamos todos los días a su lado, todos las horas de diversion, todas las horas de alegria, todo ese apoyo que no vemos si no prestamos verdadera atencion a el...pero solo  fijandonos vemos como con un poco de cariño nos sentimos la mejor persona del mundo y gracias a esa o a esas personas...
Despues de tanto tiempo, de tantos momentos, de tantas sonrisas y de tantas lagrimas, solo nos queda agradecerles su constancia, su aguante, su amistad, su cariño, su atencion...agradecerle al destino que haya decidido colocar a esa persona a nuestro lado, porque es el mayor apoyo que nadie puede encontrar en su vida...



Es en el cajón de los recuerdos donde viven los deseos, es donde aprendí a querer sin saber decir adios...

1 comentario:

  1. La gente se va. Les quieres, te quieren, y luego se van a querer a otras personas..

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